Son animales longevos, que pueden vivir hasta 60 años, por lo que tienen mucho tiempo para poder aprender y copiar la conducta de los humanos. Son capaces de aprender e imitar palabras, crear frases y copiar sonidos como timbres, ladridos y musicas si los sometemos a un paciente entrenamiento.
Es un ave social, por lo que nuestro yako intentará hacerse un hueco en nuestra familia, pudiendo respetar a ciertos miembros de la familia y denostando a otros, en busca de su sitio en la comunidad.
Por lo general, son loros dóciles si han sido debidamente cuidados y no han sufrido ninguna experiencia traúmatica antes de llegar ha nuestro hogar. Si ofrecemos a nuestro pajaro un buen ambiente, rutina y costumbres no excesivamente rígidas daremos una vida apacible al yako. Debido a la gran inteligencia del loro gris es imprescindible entretenerle, divertirle e interactuar con él, incluso si no estamos muchas horas en casa podemos dejar la jaula enfrente de una ventana que de al exterior para que el animal observe el entorno y se distraiga. La televisión o la radio tambien serán utiles en este cometido.
Si el yako da picotazos puede que note que las personas cercanas a el le temen, ya que estos notan el miedo y es la forma de someter a los humanos. Para evitar esta conducta debemos corregir al yako si da algún picotazo con una mirada rígida y un rotundo 'NO'. Estos animales se comunican mediante lenguaje visual, por lo que la mirada es importante, así se sentirán avergonzados, ya que creeran que su conducta no ha sido aprovada por su entorno social y procurarán no repetirla.
Así deberemos recompensarlo cuando haga bien sus tareas y castigarlos si se comporta de un modo innadecuado, al igual que haríamos con un perro.
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